Yo me como la tierra. El lugar que habito debe conservarse impecable y no puedo permitir que nadie vea ni una pizca de polvo aquí.
El doctor me dijo que tengo cálculos renales. Le conté la verdad. Me advirtió que si sigo así, en un año me van a reventar los riñones.
Ese es mi tiempo. Esa es mi apuesta. En un año, mi destino dictará sentencia: libre o muerto.
Un micro redondo, Leo, que cierra su círculo cuando ellector vuelve al título y sonríe.
ResponderEliminarMuy buen gobierno del ritmo -como de latigazos- y del desarrollo dramático del conflicto.
Un abrazo.
P.D. Me alegra volver a leerte.
Gracias, Pedro!
EliminarEstá bueno esto de haber logrado hacer volver al lector al título para completar el texto.
Siempre bienvenidas tus visitas por acá.
Va un abrazo.
Excelente Leo, un micro para devorarse de a poco. Saludos
ResponderEliminarJajaja! Sí. De a poco y degustando.
EliminarGracias por la visita y el comentario.
Abrazo!
Será muy bravo. Dicen que una piedra creciente de riñón causa dolores parecidos a dar a luz a un puerco espín adulto.
ResponderEliminarAhhhhh!
EliminarDe pensarlo nomás, duele.
Gracias por pasar, leer y comentar. Abrazo!